AGRADECIMIENTO

Se agradece infinitamente a todos los autores de las imágenes empleadas para elaborar estos singulares sellos de ficción porque, sin ellas no hubiese sido posible. Por la complejidad de su elaboración en muchos casos resulta imposible hacer referencia de los mismos. sellosficcion@gmail.com

SE RECOMIENDA

Se recomienda ver el blog desde ordenador y en pantalla completa F11

sábado, septiembre 16, 2023

Charles Perrault, creador de cuentos.

Charles Perrault (París, 12 de enero de 1628-ibídem; 16 de mayo de 1703) fue un escritor francés, principalmente reconocido por haber dado forma literaria a cuentos clásicos infantiles como Piel de asno, Pulgarcito, Barba Azul, La Cenicienta, La bella durmiente, Caperucita Roja y El Gato con Botas, atemperando en muchos casos la crudeza de las versiones orales, la mayoría de sus cuentos son infantiles y de fantasía.

Tuvo un hermano gemelo, François, que murió a los seis meses de vida. Su padre era abogado en el Parlamento, eso hizo posible que tuviera una buena infancia y asistiera a las mejores escuelas de la época. Ingresó en el colegio de Beauvais en 1637, donde descubre su facilidad para las lenguas muertas.

A partir de 1643 comienza a estudiar Derecho. Indudablemente hábil y con un notorio sentido práctico, recibe la protección de su hermano mayor Pierre, que era recaudador general. En 1654 es nombrado funcionario para trabajar en el servicio gubernamental. Participó en la creación de la Academia de las Ciencias y en la restauración de la Academia de Pintura. Jamás luchó contra el sistema, lo cual le facilitó la supervivencia en una Francia muy convulsionada políticamente y en la que los favoritos caían con demasiada frecuencia.

 Su vida, siempre dedicada al estudio, dejaba escaso margen a la fantasía. En su primer libro, Los muros de Troya (1661), no se muestra nada infantil. Esto se debe a que a lo largo de su burocrática y aburrida existencia de funcionario privilegiado, lo que más escribió fueron odas, discursos, diálogos, poemas y obras que halagaban al rey y a los príncipes, lo que le valió llevar una vida colmada de honores, que él supo aprovechar. Seguir

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario