Pablo
Alborán nació en Málaga (España) en 1989, canta y compone todas sus canciones,
creando una música inspirada, de una solidez, riqueza y calidad únicas en la
escena del pop latino. Cuando se escuchan canciones como Perdóname o Solamente
tú (por citar solo dos de sus grandes éxitos),
inmediatamente planea la idea de que estamos ante un compositor de altura,
serio, sensible, intuitivo, atípico, sorprendente, original… Ante un artista que
elabora con precisión de artesano un pop genuinamente español con raíces sureñas
y andaluzas, emocionado y de alcance universal.
El
éxito de Pablo Alborán vuela por encima de las estrategias de marketing. Comenzó
a darse a conocer en YouTube cantando sus canciones sentado en el sofá blanco de
su casa. Poco después recorría con sus canciones y su guitarra los club de toda
España y, antes de publicar su primer álbum, sus fans ya lo estaban esperando.
En 2011 dio más de 60 conciertos, comenzando en los escenarios más pequeños y
cerrando el año el pasado 20 de diciembre con un sold out en el Palacio de
Deportes de Madrid ante 15.000 espectadores.
La
relación de Pablo con su gente va más allá del fenómeno fans convencional y se
ha convertido en algo sólido y profundo, en una comunicación estrecha de ida y
vuelta a través de las redes sociales y de los contactos personales en los
conciertos, que lo ha situado como el artista clave de 2011. La historia es tan
sencilla como atípica y se ha desarrollado por encima de los éxitos, las cifras
de venta, el marketing y los nº1, porque han sido sus seguidores los que han
impulsado a Pablo Alborán a convertirse en un artista de referencia en menos de
12 meses. Y Pablo Alborán no olvida y siempre agradece, sabedor de que sin ellos
nada de todo esto hubiera sido posible y de que su éxito es el de la emoción
convertida en canción.
Pablo es, no solo un gran artista, que lo es, pero lo más maravilloso es su sensatez a pesar de su juventud. Esa mirada descubriendo a sus admiradores, como un niño que se ha encontrado una moneda y se ilusiona pensando de comprarse una "chuche", eso es maravilloso en cuanto a lo espontáneo. Su sencillez de no negarse nunca a entonar sus canciones a "capella" a penas se lo piden. Puedo solo decir que, lo admiro profundamente y deseo que siga siempre así de sencillo y amable ¡Muchos éxitos Pablo!
ResponderEliminarBuenas tardes, la pagina es una pasada,Jose enhorabuena.
ResponderEliminarMuy bonitos los sellos de Pablo Alboran, y un gran cantautor.