El conquistador español Sebastián Moyano nació en Belalcázar, Córdoba, hacia 1480. De ahí que, homenajeando a su localidad natal, entrara en la historia de la Colonia con el nombre de Sebastián de Belalcázar, cuya incorrecta transcripción (Benalcázar) ha llegado a popularizarse en idéntico grado. No en vano fue él quien fundó las ciudades ecuatorianas de San Francisco de Quito (1534) y Santiago de Guayaquil (1535), y también la localidades colombianas de Cali (1536) y Popayán en 1537. Lógicamente, su presencia es obligada en los manuales históricos, y no escasean las obras de arte con su efigie, caso del retrato pintado por Eladio Sevilla, que hoy exhibe el museo municipal quiteño. SEGUIR
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