El edificio actual ocupa las antiguas dependencias del convento de dominicos de Nuestra Señora de la Encarnación, o de la Mina, convento fundado en 1528 extramuros de la villa, pero muy cercano a la puerta norte de la muralla (Puerta de Badajoz). Fue edificado en terrenos cedidos por las dominicas del Convento de Santa Catalina de Zafra bajo el patronazgo de doña María Manuel de Figueroa, hija legitimada de Gomes II Suárez de Figueroa, II Conde de Feria y la condesa de Medellín por su matrimonio con Juan Portocarrero, II Conde de Medellín.
Las obras se prolongaron durante bastante tiempo, hasta el punto que en 1544 la capilla mayor de la iglesia estaba sólo comenzada y prácticamente no había nada construido de las dependencias conventuales; el cerramiento lo hace el maestro Francisco Montiel en 1580 y la obra termina en 1590 con las trazas originales del convento alteradas, dando como resultado una iglesia original para esta zona.
El retablo, que vemos en el sello, fue obra del entallador Blas de Figueredo y del pintor Francisco Gómez, ambos residentes en Zafra, y la reja de la capilla mayor de Gonzalo Martínez. Seguir
Hasta mediados del siglo XVI, la primitiva iglesia de
Santa María de la Candelaria de Zafra ocupaba junto a su cementerio anexo lo
que en la actualidad es la Plaza Grande de Zafra, no habiendo ningún dato
acerca de la época de su construcción ni sobre si sufrió o no modificaciones de
importancia, pero lo que si sabemos es que era una iglesia pequeña de forma que
en los días de fiesta los feligreses no cabían en ella; además su estado de
conservación tampoco era el idóneo. Todo ello llevó al II Conde de Feria, Gomes
II Suárez de Figueroa a solicitar bula al Papa Alejandro VI para convertir en
sede parroquial la antigua sinagoga de Zafra, ya reconvertida en iglesia, bula
que obtiene en 1500. No obstante, se sabe que se siguió usando también la
antigua iglesia medieval al menos hasta 1546, ya en un estado de ruina evidente
y progresivo. Seguir
Han quedado genial, muchas gracias.
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