En este mes de octubre completaremos con dos sellos la serie dedicada a los hermanos Arrue, todos ellos artistas vascos.
Ramiro Arrue formado en Francia entre los años 1907 – 1917, donde tuvo
contacto con diversas corrientes artísticas, (se codeo con Cocteau, Max Jacobs,
Picasso y Modigliani cuyo taller en la Grande Chaumière colindaba con el
suyo), Arrue siempre sintió predilección por su tierra natal, sus
raíces y representar los retratos vascos. Los grandes temas de la vida
colectiva están presentes en sus imágenes, de manera atemporal : escenas
del trabajo, las fiestas, la maternidad, los juegos, los deportes, los paisajes…
aunque no quiso volver a instalarse en Bilbao después de su formación parisina.
En 1922, con sus amigos Philippe Veyrin y el comandante
Boissel, Philippe fundó el Museo Vasco de Bayona.
Sus obras fueron expuestas y aclamadas con mucho éxito en
París, Londres, y en América Latina (Buenos Aires, Córdoba, Montevideo).
" Influido por el intenso conflicto –expresa Olivier
Ribeton, comisario de la exposición- entre el arte académico y el arte moderno,
Ramiro Arrue busca una tercera vía que refleje una imagen clara, visible y
clásica del sujeto a la vez que renueva la expresión formal. Interesado por las
revoluciones estéticas, se mantiene razonablemente alejado al optar por un
regionalismo deliberado como fuente de inspiración a riesgo de coquetear
prudentemente con algunos ismos, principalmente el cubismo y el simbolismo,
alcanzando, en ocasiones, una calidad de invención destacada ". Seguir
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